Eduardo Longoni es uno de los fotógrafos argentinos más importantes del país. Aunque su trabajo es silencioso y a la vez muy potente, como el de la mayoría de los reporteros gráficos, Longoni es el autor de algunas fotos épicas de la historia reciente. En su trayectoria aparecen las imágenes de la violenta represión contra Madres de Plaza de Mayo, en 1981 o el famoso retrato del primer gol de Diego Maradona a los ingleses, cuando inmortalizó a La mano de Dios en el Mundial de México, en 1986.
En los últimos años distintas iniciativas buscaron poner en valor su producción fotográfica. El libro Imágenes apuntadas, publicado en 2017, reunió 26 de sus mejores fotos tomadas entre 1979 y 2015. El programa Fotos: retrato de un país, que puede verse gratis en este link, le dedicó un episodio completo a su cobertura de la toma del Regimiento de La Tablada, en 1989, cuando consiguió el último registro con vida de dos de los cuatro guerrilleros desaparecidos en el cuartel, en pleno gobierno de Raúl Alfonsín.
El documental Una mirada honesta, de los directores Roberto Persano y Santiago Nacif, que se puede ver desde el jueves en Cine Gaumont, trabaja en dos planos. En el primero, Longoni recuerda junto a su madre los años en Mar del Plata, la ciudad donde germinó su deseo de convertirse en fotógrafo. En el segundo, trabaja en el montaje de la que será su próxima muestra -bautizada, también, Una mirada honesta– para la que ploteará un Ford Falcon con uno de sus retratos más emblemáticos.
«Ver aparecer la imagen en el revelador es la esencia de la fotografía. Creo que con la fotografía digital se perdió mucho la cuestión del revelado. El hecho de poder sacar una foto ahora y que la digitalización te permita enseguida verla le restó paciencia a los fotógrafos», dice Longoni.
A propósito del estreno de Una mirada honesta, esta semana hablé con Roberto Persano, uno de los directores del documental, sobre los inicios del proyecto y el rescate de la figura de Longoni.
El origen: «En 2018 estrenamos el documental Los Indalos, sobre la historia de Aurora Sánchez, hermana de Roberto Sánchez y madre de Iván Ruiz, que estuvieron en La Tablada. Iván fue fotografiado por última vez por Eduardo. A raíz de esa investigación, lo contactamos para hacerle una entrevista para hablar sobre esa foto y su significado. Cuando estábamos editando la película y escuchando lo que nos decía dijimos acá está el próximo documental. Acá hay un montón de historias increíbles y una sola persona condensa todas estas fotos».
El montaje: «Trabajamos con dos líneas narrativas. Por un lado, buscábamos contar un Eduardo mucho más íntimo en Mar del Plata con las primeras fotos familiares, el vínculo con su madre y con su hija. Luego el quiebre en su carrera con la manifestación en la que decide dejar de cubrir protestas en la calle. Pero también era importante la idea de ‘sacar’ sus fotos a la calle y ahí apareció la idea de jugar con el ploteo del Ford Falcon«.
La selección de fotos: «El primer recorte que hicimos tuvo que ver con la disponibilidad de espacio. Si bien todas las fotos son increíbles, con las que elegimos podés contar gran parte de la historia argentina de los últimos 40 años. También nos parecía interesante que él eligiera las fotos que le parecían más representativas».