Un territorio en disputa, una lucha desigual y el futuro de la Amazonía, la enorme extensión de bosque tropical ubicada en el noroeste de Brasil, en peligro. El territorio, un excelente documental del director estadounidense Alex Pritz, plantea estos conflictos de entrada. Grabado pocos meses antes de la llegada al poder de Jair Bolsonaro, en octubre de 2018, la producción se instala en la comunidad Uru-Eu-Wau-Wau, un pequeñísimo pueblo indígena en el estado de Rondônia, que desde hace décadas resiste los intentos por ser expulsados del lugar.
«La comunidad se defiende a sí misma y defiende su hogar, pero también es importante que el resto de nosotros, fuera de Brasil, reconozcamos que también lo están haciendo por nosotros, y que su trabajo puede salvarnos a todos de los efectos de nuestras propias emisiones en un planeta que se calienta», aseguró Pritz.
«Las ONG no recibirán más dinero. No quedará ni un centímetro más de reservas indígenas», prometió Bolsonaro en su campaña. Ese desinterés por proteger una zona estratégica y la incapacidad de empatizar con estas poblaciones cruzan toda la película. El director consiguió un acceso privilegiado a la zona para ver de cerca cómo el avance de la deforestación y la quema intencional de selva ponen en riesgo el futuro del «pulmón verde» del planeta (*). Según el documental, cerca de 200 personas viven hoy en el pueblo Uru-Eu-Wau-Wau.
«En este momento hay más invasores que indígenas en nuestro territorio«, dice Bítáte, el líder de una de las patrullas de vigilancia armada con arcos y flechas. Esos invasores de los que habla se pueden dividir en dos bandos. Por un lado, una asociación de productores rurales que impulsa la tala indiscriminada y busca hacer nuevos negocios. Por el otro, un hombre llamado Martin que se proclama dueño de la tierra y busca levantar su propia casa en el lugar a cualquier costo. «Nadie puede controlarnos, solo Dios», asegura. Según Pritz, que en su largometraje busca todo el tiempo matizar el conflicto, las personas como Martin son ingenuos «que no entienden el contexto histórico de sus acciones, las consecuencias ecológicas, lo que están haciendo para el resto del planeta».
Un aspecto interesantísimo del trabajo, estrenado por Disney+, es que consigue testimonios de ambos bandos, pero esquiva el recurso fácil de las dos campanas. Por el contrario, El territorio sienta posición respecto de las consecuencias que podrían acarrear el abandono estatal y el impacto de una zona liberada para negocios agrícolas.
El segundo punto que me pareció un hallazgo es el documental dentro del documental. Bítáte graba con su cámara y produce su propia película de denuncia. Buena parte de las tomas que incluye El territorio fueron grabadas por integrantes de la comunidad cuando la pandemia de COVID-19 restringió la posibilidad de rodar en la selva. Una especie de «coproducción» que sumó muchísimo valor.
El territorio ganó el Premio del Público en el Festival de Sundance de 2022.
(*) Recomiendo el episodio 6 del podcast La revancha, conducido por el periodista Juan Elman, titulado Amazonas: ¿Quién podrá apagar tanto fuego? Ahí se ordena la información y se ponen en contexto algunos de los conflictos que aparecen en este documental. El capítulo se estrenó el 16 de septiembre de 2022, un mes antes de que Lula da Silva se convirtiera en el nuevo presidente de Brasil